Spaßfaktor | |
Flugverhalten | |
Materialqualität | |
Aufnahmequalität | |
Preis-Leistung | |
Promedio 0/5 |
En el siguiente informe de prueba del dron, presentaremos brevemente el pequeño dron volador y explicaremos lo que debes tener en cuenta.
Antes de comprar, decide si quieres el clásico Smartplane Pro o el Smartplane Pro FPV. La versión FPV, por supuesto, viene con gafas de realidad virtual.
Como la versión clásica Pro no tiene cámara incorporada en el avión de acrobacias, no puedes simplemente comprar las gafas FPV y conectarlas al avión teledirigido. Ambos dispositivos se diferencian en el precio en que la variante FPV cuesta casi el doble. Esta aeronave pertenece a la categoría de los aviones teledirigidos de entrada.
Entrega y calidad
El avión pequeño está empaquetado en una caja grande. Dentro está el Smartplane Pro, una unidad de control para el Smartphone, 2 hélices de repuesto, varias herramientas para cambiar las hélices, batería, instrucciones, conexión USB para cargar la batería.
La batería sólo tiene 185 mAh, pero aquí tienes un modelo de aeronave que genera sustentación por medio del deslizamiento y no por medio de la propulsión directa de la hélice como un avión teledirigido. Por lo tanto, el Smartplane Pro tiene un tiempo de vuelo de 12 minutos según el fabricante. Como la cantidad de carga es tan pequeña, la batería sólo necesita ser cargada durante unos 20 minutos a través de un puerto USB en un portátil. Para ello necesita el accesorio USB incluido, que está equipado con los correspondientes LEDs que informan sobre el estado de carga.
También es ventajoso que pueda llevar varias baterías cuando vuela. Así que teóricamente se puede lograr un tiempo de vuelo infinito con algunos aterrizajes intermedios colgando las otras baterías mientras tanto en el portátil u otra fuente de energía.
La herramienta para la hélice parece un poco inusual, pero con ella se puede cambiar la hélice sin problemas. Una ya está premontada y dos más están incluidas como hélices de repuesto.
Las alas del avión están hechas de poliestireno, lo que nos hizo sospechar un poco al principio, porque en caso de accidente podrían romperse. Sin embargo, aquí se utilizó un material muy fuerte. El fabricante dice que no es un poliestireno convencional, sino un desarrollo propio, que debería sobrevivir a fuertes choques.
Así que si no chocas a alta velocidad cuando estás cayendo en picado, pero tratas el modelo con normalidad, no te romperás las alas. Especialmente porque el Smartplane Pro pesa sólo 38 gramos con una envergadura de 30 cm.
Comportamiento y control del vuelo
El control siempre se realiza a través del Smartphone. Puedes usar el joystick incluido. Puede colocarse en la pantalla y manejarse cómodamente con el pulgar derecho.
En la aplicación se puede consultar el tutorial «Aprender a volar» antes del primer vuelo, que también recomendamos para familiarizarse con las características básicas de vuelo. En este tutorial, los videos detallados explican cómo lanzar y operar el Smartplane Pro.
Además, la aplicación muestra el estado de carga de la aeronave y la calidad de la conexión. Con el campo táctil «Lanzamiento» puedes poner en marcha el motor y controlar la velocidad deslizando el pulgar hacia arriba o hacia abajo sobre la pantalla. La pantalla siempre muestra un porcentaje de la velocidad máxima.
Inclinando el Smartphone y usando el accesorio incluido, el avión puede ser controlado en su posición y actitud. El accesorio del joystick puede utilizarse en «modo de control», de lo contrario el Smartphone y su panel táctil y sensor de posición pueden utilizarse para controlar la aeronave de forma normal. En el modo de control encontrará el campo táctil para «Lanzamiento» y el control de velocidad en el lado izquierdo, en el lado derecho el campo donde tiene que colocar el joystick y luego controlar la aeronave.
En el aire, el Smartplane Pro se mueve bastante rápido y ganas altitud con bastante rapidez. Debes asegurarte de que el alcance de la radio sea de unos 100 metros, pero a esta distancia el avión es difícil de localizar de todos modos.
Tampoco hay que subestimar el hecho de que el planeador se hunde muy rápidamente cuando se dirige hacia abajo y que esto puede conducir a accidentes. Pero si te estrellas en un prado, al Smartplane Pro no le importa en absoluto.
Volar es definitivamente muy divertido, porque es ágil y ágil en el aire, y al mismo tiempo muy fácil de controlar. Con el tiempo, también tendrás una sensación del Smartplane y te será cada vez más fácil probar maniobras más arriesgadas y grandes formaciones de vuelo.
Si tienes un 100% de empuje a plena carga e inclinas tu nariz hacia arriba y luego contrarias a la dirección demasiado fuerte, puede suceder que el avión se hunda muy rápido y se estrelle. Aquí puedes encontrar el equilibrio correcto mientras vuelas.
Si el Smartphone es sacudido, llega a la máxima velocidad. Además, es posible seleccionar un truco específico en la aplicación y luego realizarlo. El más espectacular es probablemente el clásico looping. Además, están disponibles los siguientes modos de vuelo: Modo de vuelo, modo de helicóptero, Cobra y muchos más.
Conclusión sobre el dron de entrada
Con todo, obtendrá un muy buen avión, que es robusto, ágil, rápido y sobre todo muy divertido!
El fabricante ofrece un total de 3 paquetes básicos diferentes. Primero el paquete Smartplane Pro sin gafas, luego el paquete Smartphone Pro FPV con juego FPV y el paquete Smartphone Pro FPV + con gafas FPV, con función de grabación y recepción de señal mejorada por las antenas de diversidad. Por lo que el paquete plus es unos 50 euros más caro que el paquete FPV normal y el avión sin gafas cuesta sólo la mitad que con.
Es cuestionable si el doble precio está justificado, ya que las mismas gafas FPV también están disponibles por separado por menos de 50 euros, pero no se pueden utilizar con el Smartplane Pro normal, ya que no hay ninguna cámara instalada para ello. Sólo en el Smartplane Pro FPV y la variante plus hay una cámara instalada que podría justificar el doble precio en combinación con el mayor gasto de la tecnología de transmisión.
Recomendamos que piense cuidadosamente si quiere usar el modo FPV o simplemente volar por el aire y realizar acrobacias salvajes.
Nuestra conclusión sobre el Smartplane Pro es muy positiva y encontramos que la calidad es muy alta para este pequeño avión y definitivamente vale la pena comprarlo. Por supuesto que este no es un avión profesional, hay que tenerlo en cuenta, sino más bien un juguete, pero el factor de diversión también se da para los adultos.